El buen amor en pareja
De Bert Hellinger aprendimos que sin la madre no hay pareja.
Esto nos lleva a aceptarla incondicionalmente y darle su lugar de madre en nuestro corazón, haya sido como haya sido, tomando nosotros el lugar de hij@s.
Después, reconciliarnos con nuestro padre dejando con ambos (mamá y papá) su historia y sus enredos, ya que ellos fueron y son los padres correctos.
Sin tomar un lugar ni a favor ni en contra, porque el corazón del hij@ ama exactamente igual a mamá y a papá.
> L@s hij@s tienen que separarse de su sistema de origen y formar uno nuevo e independiente. <
Cuando podemos reconocer que gracias a esa pareja, humanos e imperfectos, y al amor que se tuvieron nacimos nosotros, reconciliamos internamente la figura del hombre y de la mujer (de la pareja), de la madre, del padre y del hij@ (la triada divina), y así nos llega la armonía al corazón y el permiso sistémico para el buen amor de pareja, el amor adulto, el amor co-creador, el amor que merecemos.
Así l@s hijo@s pueden abrirse a la vida y con su propia fuerza y su propia luz, más allá de sus padres, priorizar en su propia pareja, sus hijos, sus proyectos y sueños. Entregándose de corazón a la creación, mantenimiento y protección de su propia familia, en sintonía y armonía con la vida.
Andrea Kaimas
~ Terapeuta en Biodescodificación ~
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Imagen tomada de internet

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